Música + Movimiento: Relacionar estas dos palabras automáticamente con el arte de la danza es inevitable pero no necesariamente tiene que ser así. Innegablemente van de la mano pero la música influye al movimiento más allá de un baile rítmico y armónico, es cuestión de motricidad básica y auto-percepción

El hombre adquiere su lenguaje y modo de expresión desde que llega al mundo y empieza a ser influido por su entorno. Al estar presente la música indica una influencia directa sobre nuestro desarrollo, conducta, personalidad, percepción, etc.

Nuestra existencia adquiere su sentido a través de las diferentes experiencias que va captando el ser humano a través, precisamente, de los sentidos. El silencio absoluto así como la quietud absoluta son conceptos conocidos teóricamente pero inexistentes en la realidad. La música nos ofrece una experiencia única a través de sus elementos de composición: el ritmo, la armonía y la melodía. En conjunto provocan reacciones y estímulos dentro del ser humano e influye su necesidad de expresión a través del movimiento.

La música y el movimiento han mantenido y siempre mantendrán una relación e influencia directa uno sobre otro. Puede ser un elemento manipulable dentro del espacio a través del tiempo, usado a favor o en contra de nosotros en un nivel no controlado por nosotros. Esto sucede por el hecho de que la música (por medio del ritmo) ordena la voluntad del hombre y enfoca su atención.

Por más alejados que creamos estar de su influencia nunca saldremos exentos de ella.

>Lino