Causatus Mentis

Archive for the ‘αρχιτεκτονική’ Category

Αντιπροσωπείες στην Αρχιτεκτονική

In αρχιτεκτονική on 31 31America/Mexico_City marzo 31America/Mexico_City 2014 at 6:30 PM

En su definición más simple, la arquitectura es el arte de diseñar espacios. Algunas personas pensarán, ¿Y eso qué tiene de difícil? Cualquiera lo puede hacer. Pero aquí viene lo interesante, el verdadero arte del diseño.

La arquitectura debe representar su entorno físico y la época en la que se vive, debe ir evolucionando conforme lo hacen la sociedad, los avances tecnológicos y la naturaleza. Idealmente, deberíamos de tomar en cuenta (y casi exclusivamente utilizar) los materiales disponibles en la región. Estos materiales, ya sean naturales o manufacturados, son los apropiados ya que se adecúan al clima de la zona, generalmente tendrán un menor costo que un material transportado y tienen una menor huella de carbono (gases de efecto invernadero emitidos por efecto directo o indirecto de un producto). En pocas palabras, entre menos transportación menos contaminación.

Los avances en la tecnología cada vez hacen más eficientes la construcción de una edificación y al edificio en sí. No necesariamente hay que dejar de lado lo rústico o artesanal, pero si aprovechar los recursos que estén a nuestro alcance; todo esto para ahorrar energía, dinero, materia prima, recursos humanos y promover la sustentabilidad.

Al diseñar un edificio o espacio, se debe en todo momento responder al concepto de vida actual. No estamos desechando de ninguna manera lo futurista o la innovación, sino que el diseño se debe adaptar a las condiciones en las que vivimos, representar los cambios sociales y al mismo tiempo proponer una mejor calidad de vida.

La arquitectura es la representación física del pasado, presente y futuro de una civilización, de una época o de una cultura. A través de las edificaciones podemos conocer muchas características acerca del lugar en el que se encuentra la construcción y de las personas que la construyeron, tales como el clima, la topografía, los desastres naturales o provocados, el estilo decorativo, las creencias y la forma de vida.

>Studio ReDesign

http://www.studioredesign.com/

πόλη ως αντικείμενο και την αποσύνθεση της αστικής πολυπλοκότητα

In αρχιτεκτονική, Uncategorized on 31 31America/Mexico_City enero 31America/Mexico_City 2014 at 5:25 PM

Nombrar es un acto natural en el hombre, pero a su vez, es un acto político. El lenguaje permite al ser humano no sólo actualizar lo histórico sino que puede pensar prospectivamente creando escenarios previsibles de ciertas acciones.

En este escenario definir la ciudad es ejercer poder sobre este ente que ya hemos denominado como caótico y complejo. Stefano Boeri, expresa este conflicto en su texto Atlas eclécticos, donde se detiene a profundizar sobre la retórica del caos que envuelve lo urbano y cómo esta misma retórica produce una especie de ciclo que lleva a no entender el caos que se nombra.

El problema de la retórica del caos se agudiza cuando este escenario de complejidad que nos presenta lo urbano es concebido como un objeto que, por dicha condición, puede ser diseñado, reparado, recortado y reproducido. Entender la ciudad a través de su forma es continuar con el discurso que da primacía a la idea de metrópoli como objeto, es decir, seguir dando juego al escenario en el que arquitectos y urbanistas (sobre todo los primeros) se apropian de las fichas que están formalmente disponibles para hablar y, por tanto, hacer ciudad.

Entender a lo urbano como algo más que un gran objeto arquitectónico provee el primer paso para establecer un acercamiento crítico y más real sobre la ciudad. Así, entender que el espacio no es un vacío que se llena, sino es también esa red de flujos donde converge información, relaciones, cultura y política.

Es posible que frente a la financiarización, que representa un realidad moldeada por medio de valores abstractos, deseamos o apreciamos, de forma creciente, las representaciones que asemejan a esta tendencia económica, es decir, un tipo de representación desligada por completo de las características físicas del territorio.

Cuando la representación de la ciudad se entiende como consecuencia inevitable del sistema económico dominante de un momento histórico particular deja fuera las heterotopías, tanto en la definición de Foucault quien las propone como consecuencias espaciales producto de rupturas; Lefebvre las ubica como comportamientos cotidianos que se colectivizan en momentos de irrupción.[1]


[1] Mientras que Foucault propone que las heterotopías son lugares donde confluyen las relaciones distintas a las lógicas dominantes y por tanto constituyen islas dentro del espacio totalizador la visión de Lefebvre propone que dicho espacio está habitado por dinámicas heterotópicas cotidianas, las cuales, más que tener una consecuencia espacial, se traducen en momentos de “irrupción” donde estas prácticas, ya existentes, adquieren un carácter colectivo. Para ver más sobre este tema: Foucault, Michael: «Of other spaces», Diacritics Nº 16, págs. 22-27, 1986 y Harvey, David, Ciudades Rebeldes. Del derecho de la ciudad a la revolución urbana, pág. 14, 2012.

Si la ciudad fuera un objeto, las diferencias entre las definiciones de Foucault y Lefbvre no serían posibles, ya que el objeto en sí mismo no permite contradicciones; es sólido, es un producto cuyas partes embonan y son coherentes entre sí. En cambio, la ciudad, entendida como sistema complejo, admite estas paradojas y ello se refleja en las propiedades de multiplicidad, apertura y adaptabilidad.

Ni la definición incompleta, ni la objetivización limitante, ni la representación emanada de los sistemas financieros, que descompone el concepto de lo urbano, son instrumentos funcionales para el entendimiento de la complejidad de las dinámicas y procesos que conforman, segregan, transforman y enriquecen el, actualmente ininterrumpido, territorio urbanizado.

La ciudad como objeto y la descomposición de la complejidad urbana

La ciudad como objeto y la descomposición de la complejidad urbana.

>PROYECTOR

http://ciudadproyector.wordpress.com/

Ο σταυρός της ενορίας μου

In αρχιτεκτονική on 31 31America/Mexico_City agosto 31America/Mexico_City 2013 at 11:40 PM

Identidad es saber quién eres, cómo te llamas, de dónde eres, a qué te dedicas, a qué lugar perteneces, con qué te identificas. Y en ese sentido el espacio natural y el construido son determinantes para forjar nuestra identidad.

Las montañas, los ríos, los ojos de agua; los árboles, las flores de estación, el paisaje; así como las casas, la escuela, la plaza, el monumento arquitectónico, nos permite identificarnos y sentir un arraigo y una pertenencia a un sitio determinado.

Dentro de estos elementos físicos, la arquitectura se convierte en un factor fundamental de identidad en cualquier comunidad establecida, la iglesia familiar, la casa de la abuela, la escuela donde estudiaste, la plaza de encuentro con los amigos, la calle de juego, la imponente avenida principal, la casa más bella que has visto, el edificio abandonado, la edificación que guarda misterios o la constante armónica de una calle bien compuesta, son elementos que como diría Jorge Luis Borges se convierten en «la confianza que nos infunden los lugares conocidos».

Es difícil clasificar si la identidad es algo innato o aprendido, pero lo que es cierto es que implica una sensibilidad especial para que persista por generaciones un mismo espacio y una arquitectura, una comunión de muchas personas para lograr que la identificación de un sitio continúe y no se transforme.

José Emilio Pacheco escribió en su poema Alta Traición: “no amo a mi patria, su fulgor abstracto es inasible, pero (aunque suene mal) daría la vida por diez lugares suyos…” Y así, cada quien en su unicidad comienza a tener una identidad a partir de lo que lo rodea. Los Chiapanecos, por ejemplo han de identificarse con la arquitectura fantástica de San Cristobal de las Casas, la casa colonial, vernácula, de un piso, adobe enlucido, con techos a cuatro aguas cargados por robustas gualdras y columnas labradas de madera que conducen el agua a su patio central. Y en sus calles, con la armonía absoluta del juego armónico de las diversas casas en su mayoría de un nivel, que van enmarcando las calles con un ritmo constante de puertas y ventanas con sus jambas, dinteles y pretiles ligeramente decorados y al final rematados por montañas siempre verdes. La gente del campo en cambio, debería de identificarse con las casas hechas con tablones de madera, cálidas y acogedoras, que con tan sólo abrir un par de ventanas corre el viento y refrescan.

Los Tlacotalpeños, seguro que han de sentir orgullo por tener como guardián el Río Papaloapan y el maravilloso paisaje veracruzano tras de él y en la otra margen las admirables casas de adobe cubierto con aplanados de mil colores, con sus pórticos protegidos por columnas y arcos que van saltando y protegiendo al que habita y al que transita. Lo mismo ha de suceder con sus plazas constantes, sus claras iglesias que retan con sus torres la altura de las palmeras o, sus calles de pasto que dirigen el agua de lluvia directo al río.

Los Guanajuatenses con sus calles intrincadas y sus casas de mil colores increíblemente acomodadas entre estrechos callejones y pendientes retadoras. Sus variadas formas armonizan entre sí en un conjunto que fue edificándose en el tiempo en una necesidad básica de habitar. Los Oaxaqueños han de identificarse con sus casas señoriales del Centro Histórico en su cantera verde tan particular, sus herrerías y labrados tan excelsos. Los Poblanos con sus majestuosas casas e iglesias cubiertas con detalles en Talavera y así cada región de México.

Y qué decir de los Chilangos-Capitalinos con sus variadas arquitecturas, las casas virreinales del Centro Histórico forradas en tezontle, recinto y cantera, todas majestuosas con patios, escaleras y salones de factura hermosa. Las casas con azulejos de Talavera, con herrerías y detalles únicos en el mundo. Pero también está la arquitectura majestuosa de las casas en las Lomas de Chapultepec y Polanco en un muy particular estilo de exuberantes tallados en cantera y herrería. O las casas tipo hacienda en los antiguos pueblos de México como San Ángel y Coyoacán; las colonias obreras y modernas que resaltan por su arquitectura funcionalista, art-deco, bauhaus, racionalista, etc. Son tantos los estilos que hay en la Ciudad de México, tantas las colonias, tantos los arquitectos que han intervenido y los periodos en que se ha ido edificando que es fácil perder la identidad más allá de la propia casa, de la propia calle, del propio barrio o de la propia colonia.

Identidad es finalmente, pertenecer a un territorio y reconocerse como tal. Es sentir tal orgullo de ser de ahí, de apreciar lo que se tiene, de observar lo que existe y lo que se ha forjado en el tiempo; identidad es un sustantivo, pero a la vez me parece un adjetivo y un verbo porque es una actitud y una forma de ver; es sentir que lo que nos rodea y nos pertenece emocionalmente.

Identidad es un hecho irrevocable, no hay confusión, no hay duda de que eso que vemos es lo que somos, es por ello emergente que nuestra sociedad se identifique con su entorno, con su calle, su arquitectura, eso permitirá una verdadera preservación y mejora de nuestro entorno. El dicho popular “la cruz de mi parroquia” resume bien lo que es la identidad. Es decir, estoy tan orgulloso de lo soy, de lo que tengo, de lo que me rodea que me reconozco y “no niego la cruz de mi parroquia”.

>FUNDARQMX
http://www.fundarqmx.com

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Διαδικασίες παραγωγής

In αρχιτεκτονική, Uncategorized on 31 31America/Mexico_City julio 31America/Mexico_City 2013 at 10:15 PM

PROCESOS DE PRODUCCION, ¿en arquitectura o de arquitectura?

PRODUCCION: fabricación o elaboración de un producto. (Wikipedia)

La definición con la que inicio este artículo es la más básica y obvia de la palabra producción, y como bien indica se trata de crear algo, en este caso un producto. Dicho producto puede ser desde un objeto, un concepto, un vegetal, un proceso, pero me pregunto ¿También se puede producir un edificio?. Basándonos en esta sencilla descripción del verbo producir podemos afirmar que lo podemos hacer, podemos producir un edificio. Pero ¿“producimos” o “creamos” un edificio?, sin duda alguna nuestra concepción se modificó los últimos años, podemos decir ahora, ¿se trata de “producir” y no de “crear”? Crear es una palabra que envuelve un acto casi mítico, celestial, y sin embargo como arquitectos la usamos todo el tiempo, “creamos espacios”, “creamos ambientes”, será que tenemos este poder o simplemente no nos hemos dado cuenta que lo nuestro es simplemente una producción de espacios. De nuevo hay un conflicto, no producimos espacios, el espacio ahí esta, nosotros simplemente producimos la envoltura de dicho espacio, por lo tanto generamos-producimos envolventes de espacios, eso es lo que «producimos”. Esa es la descripción que estaba buscando, ‘productores de envolventes espaciales”. No pensé al referirme a la palabra producción llegaría a tener que describir mi profesión de esta forma, y ahora que la leo de nuevo me parece, bastante divertida.

Una vez que ya tenemos la definición “productores de envolventes espaciales” me referiré al acto de producir dichas envolventes, con lo cual espero estar cumpliendo con el encargo, es decir, hablar de los procesos de producción, en este caso de la arquitectura. Bueno en realidad se trata de la palabra PRODUCCION, pero tengo que decir que desde hace 7 años la generación de arquitectura (dentro de mi oficina) ha sido un gran proceso. Al mismo tiempo lab07 se encuentra en su propia producción, es la idea, los conceptos, los desarrollos, las experiencias, las necesidades, las inquietudes, las causas, las economías, y muchos otros factores terminarán de producir y por tanto dar forma a esta joven oficina de arquitectura. Así de endeble es la producción, moldeada por todo en todo momento, por lo tanto los resultados, hablando en términos arquitectónicos serán diferentes, o por lo memos deberían de serlo porque de lo contrario terminaremos bajo uno de los conceptos más temibles de los arquitectos, “PRODUCCION EN SERIE”.

bild 1 CM


Ordenes Arquitectónicos

2011 MUNICH 2018 VILLA OLIMPICA / CONCURSO / lab07 Carlos Marín, David Maestres, Alex Hausr, Silvia Benedeto, Oliver Valle

2011
MUNICH 2018 VILLA OLIMPICA / CONCURSO / lab07
Carlos Marín, David Maestres, Alex Hausr, Silvia Benedeto, Oliver Valle

Hablemos un poco de estos procesos, de cómo influyen y como ayudan a generar estas respuestas espaciales, o “productos espaciales”. Para producir algo es necesario tener una necesidad, una idea, una inquietud, una pregunta. Generalmente el cliente tiene una idea de lo que necesita, una casa, un edificio, un estadio, una clínica o un parque. Todos estos espacios son reflejos instintivos combinados a través necesidades sociales, económicas o necesidades espaciales. Nuestra tarea es “producir una envolvente” que satisfaga todas estas inquietudes, (pido una disculpa por este discurso tan industrializado, pero creo que el arquitecto tiene que flotar entre dos conceptos, “el crear” y “el producir”.

Durante los últimos años la producción arquitectónica o de arquitectura ha sufrido grandes cambios, sin duda la tecnología ha sido uno de los factores que más han contribuido y modificado los procesos de producción. Apenas hace unos diez años el hecho de generar 20 opciones diferentes para una propuesta de un edificio de oficinas en poco tiempo era casi imposible, con nuestra actual tecnología podemos producir 20 o más en una semana, con tantas y tan diferentes variantes que llega a ser ridículo el número de opciones que puede llegar a tener un edificio. Tengo que decir que hay oficinas que incluso generan opciones que no funcionan solo para saber que no funcionan, y todo esto es porque es muy fácil producirlas, solo se necesita un ordenador muy básico para hacerlo. El diseño se moldea a través de la memoria RAM, se pule con ayuda del teclado, la línea de producción es un cable que lleva al servidor principal, que a su vez conecta con tal o cual archivo ubicado en una carpeta de nombre .MAX, .PSD, .DWG, etc. ¿Será necesario todo esto?

2012 CONCURSO / LA SALLE / lab07 +JMV Primer Lugar

2012
CONCURSO / LA SALLE / lab07 +JMV
Primer Lugar

Hace años se dibujaba todo a mano y no se tenían más de dos o tres opciones. No había forma de hacer 40 opciones (aunque sea conceptuales) en una o dos semanas. Los medios de producción nos han jugado una mala pasada, nos han facilitado más y mejores herramientas, y aún así generamos opciones que sabemos que no sirven solo para saberlo. Es verdad que lo que importa es el resultado, pero el aprendizaje esta en el proceso. La arquitectura no importa si se produce a mano o con “mouse”, el acto de pensar la arquitectura es lo que realmente importa. Hay miles de maneras de entender la arquitectura, y por lo tanto de “producirla”.

Un fenómeno importante que refleja este concepto de “PRODUCCION” y me refiero a producción como proceso de fabricación o elaboración de un producto con una o varias opciones son los concursos, su dinamismo y rápida respuesta han obligado a todo tipo de oficinas a participar. Oficinas pequeñas de una o dos personas se pueden dar el lujo de competir con los grandes despachos formados por 30 o 40 personas. Me parece fascinante ver los acercamientos y resultados que hay en los concursos de arquitectura, 200 oficinas entendiendo sus procesos, generando sus respuestas, haciendo uso de croquis, maquetas, modelos 3D, cortadoras laser, 3D printers, fotografías, y montajes, con el fin de crear un único producto. Es aquí donde la “producción de arquitectura” ha regresado a ese antiguo taller, a esa antigua fabrica, a ese dinámico laboratorio o a esa multidisciplinaria oficina produciendo respuestas, simplemente los procesos han evolucionado, se puede decir que seguimos PRODUCIENDO.

>lab07

http://www.lab07.mx

άρθρο

In αρχιτεκτονική on 30 30America/Mexico_City marzo 30America/Mexico_City 2013 at 9:00 PM

… de Steven Johnson “Sistemas emergentes. O qué tienen en común hormigas, neuronas, ciudades y software”.

Para empezar, ¿qué es un sistema emergente?, ¿qué son las emergencias?. Citando la definición del libro, sería lo siguiente: “Emergencia es lo que ocurre cuando un sistema de elementos relativamente simples se organiza espontáneamente y sin leyes explícitas hasta dar lugar a un comportamiento inteligente. Sistemas tan dispares como las colonias de hormigas, los cerebros humanos o las ciudades siguen las reglas que la emergencia dicta.”

¿Cómo este principio se aplica desde las especies más diminutas como el moho de fango, hasta en el desarrollo/pensamiento urbanístico de las más complejas ciudades?

Hablando de las ciudades, Johnson nos dice que son el resultado del pensamiento de la vida urbana, que son un sistema que no fue un proceso planeado en sus orígenes, sino que surgieron a partir de los comportamientos individuales espontáneos que poco a poco fueron deviniendo en el complejo sistema que hoy rige las ciudades.

Cuando un sistema emergente se convierte en uno más complejo, como es el caso de las ciudades, ya podemos hablar de un principio o fundamento básico que hace que todo funcione en orden, y es el que este sistema sea un organismo altamente capaz de generar conductas, procesos creativos e innovadores que le permitan adaptarse a diferentes tipos de cambio, logrando con esto que sea un sistema en constante movimiento, regenerándose y reinventándose a sí mismo.

Ahora bien, estos sistemas urbanos llamados ciudades cobran vida y se reinventan en la medida que se relacionan con otras ciudades, para formar así un sistema mayor y donde cada componente juega un papel diferente.

Quizá al hablar de un sistema de ciudades ya no podemos hablar de un comportamiento puramente emergente, pues ahí ya intervienen otros factores tales como la política, la geografía, la economía, aspectos sociológicos etc. Pero si podemos decir que la ciudad es desde el principio de los tiempos, el centro de todas las actividades que hoy en día rigen la vida del ser humano en todos los aspectos en los que se desenvuelve, la ciudad como centro de democracia, trabajo, actividades económicas, y todas ellas si tienen como base un básico sistema emergente.

>Maya

«εξιδανικεύω»

In αρχιτεκτονική on 29 29America/Mexico_City octubre 29America/Mexico_City 2012 at 7:35 PM

La arquitectura comunica aun sin un receptor.

La arquitectura es ficción, se piensa, experimenta, proyecta, simula, construye y discute, la ficción está hecha  a base de ideales y realidades y es en esta ficción en donde opera la arquitectura.

La arquitectura se construye a base de ficciones, desde que se piensa hasta que se materializa.

La arquitectura a veces se posa como objeto extraño en el sitio, hay arquitecturas como ovnis del cual se tienen que formular instructivos para aproximarse a ella, después apropiársela. Otra emerge como si siempre hubiera estado ahí, tan cercana que es natural aproximarse y apropiarse de ella.

 La arquitectura no empieza de cero ni tiene meta.

La arquitectura supone que la idea está ligada con la realidad, la verdad es que lo comprueba, liga aquello que se desconoce y que se conoce como verdadero; liga al objeto con el sujeto, pero también desliga presupuesto y tiempo, la arquitectura aspira a comprobar lo que la prueba y error dictaminen.

La arquitectura existe siempre en base a referencias.

La arquitectura no depende de una sola persona o un grupo de personas, tiene dependencia de actores externos que aún sin el conocimiento de la disciplina la van construyendo poco a poco.

La arquitectura no tiene un uso específico es mil usos; está viva y muerta, es dinámica y estática, es lo que coop himmel(b)lau manifestaba en 1980 en la arquitectura debe arder, pero también es lo que los ojos de la piel de juhani pallasmaa criticaba sobre la visión de ésta, no hay una sola arquitectura hay muchas arquitecturas.

La arquitectura vive en un proceso en donde todo puede salir mal, o se queda en idea o se hace realidad, o se piensa o no o solo se materializa.

La arquitectura esta en medio de todo.

Idealismo es antónimo de realismo…

Uno se sustenta en la teoría, el otro en la práctica…

Uno es pensamiento, el otro es evidencia…y la evidencia va mas allá de la materia, la materia siempre está, la idea no.

El idealismo es objetivo y subjetivo, el realismo es objeto y sujeto…

Uno se resume en idea, el otro en acción.

La idea es una imagen pensada, la realidad es una imagen construida…

La idea es planteamiento, concepción, proyecto, plan, bosquejo, esbozo, boceto, diseño, la acción es voz, modo, derecho, influencia, postura, ademán, gesto, ejercicio.

Una imagen es pensamiento y obra y entre ese pensamiento y obra esta la arquitectura, ni antes ni después, ni en el principio ni en el fin,  ni es introducción ni es conclusión, la arquitectura es situación, gestión, negociación, fricción, habitación, adaptación, transformación e incluso desaparición, ni se puede situar en lo ideal ni en lo real, está en posición media entre lo que puede ser, lo que debe ser y lo que es.

La arquitectura está en medio de un ideal y una realidad.

Hoy poca arquitectura busca usuarios, la mayoría busca reconocimiento.

Hoy poca arquitectura es comunicación, la mayoría es publicación.

Y si es preciso que la arquitectura rompa vínculos con la filosofía y con el arte y que los reconstruya con la sociedad, que se reinvente a partir de todos los errores que ha cometido que ponga en acción los resultados de esa prueba y error.

Idealizar es seguir pensando en uno mismo, realizar es pensar en la colectividad.

>Anónima

 www.anonima.com.mx

In αρχιτεκτονική on 31 31America/Mexico_City agosto 31America/Mexico_City 2012 at 10:10 PM

En 1871 el excéntrico y fantástico escritor y matemático, Lewis Carroll (Daresbury, 1832) acuñó el término portmanteau en su obra A través del espejo y lo que Alicia encontró allí (2011, 6°Piso)mediante el cual constituyó un juego lingüístico que supone la formación de una palabra nueva mediante la conjunción de dos palabras distintas, pero generalmente pertenecientes a un mismo campo semántico.

Si trazamos una senda lacaniana entre lenguaje y discurso, podremos encontrar como a lo largo de la historia que el arte, o la creación artística, se ha convertido en un interminable portmanteau; es decir, el artista no es la apoteosis del creador, si no un astuto ladrón que adapta cada conocimiento aprendido a la frescura de la época imprimiendo desde luego características personalísimas que hacen de su obra una aparente creación original y posteriormente hacerse de un carácter artístico.

Rem Koolhaas (Róterdam, 1944) cuestiona en La Ciudad Genérica (2006 G.Gili) la constante convergencia de cada obra, de cada creación, que deriva en configuraciones casi idénticas que complacen al gusto de la época. “¿Y si esta homogenización accidenta –y habitualmente deplorada- fuese un proceso intencional, un movimiento consciente de alejamiento de la diferencia y acercamiento a la similitud? ¿Y si estamos siendo testigos de un movimiento de liberación global: ¡Abajo el carácter!? ¿Qué queda si se quita la identidad? ¡Lo Genérico!”.  Sin embargo el panorama no es tan catastrófico como Koolhaas describe, aunque no del todo falso. Aterrizando en la arquitectura, el portmanteau ha trascendido más allá del lenguaje y se ha convertido en un generador de tipologías, estilos y estrategias de diseño para el arquitecto. De tal modo que a surgen a partir de cafés y librerías: cafebrerías, así como incontables edificaciones multi-programáticas que ofrecen al usuario la posibilidad y pasividad de vivir, trabajar, comprar, divertirse en un mismo conjunto. En una ciudad como nuestra querida Ciudad de México no es extraño encontrarse con uno de estas novísimas edificaciones, que se anuncian como oasis dentro de un paradójico desierto atestado de tráfico e inseguridad, todo un éxito para los especuladores inmobiliarios que han logrado su segundo aire tras el desarrollo de las unidades habitacionales verticales en los años 70’s.

Se puede pensar que esta respuesta es la solución ante una ciudad que no admite peatones y padece de una constante emésis vehicular, generando asimismo ambientes casi idénticos en cada plaza comercial, edificio de oficinas, vivienda con un efecto similar al que tiene Disneyland, con configuraciones que desubican espacial y temporalmente al usuario, no hay diferencia entre Florida, París o Tokio, de la misma manera no hay diferencia sustancial entre un edificio y otro, cada uno cuenta con una pequeña tienda de auto servicio, gimnasio y una conveniente cercanía hacia algún Starbucks Coffee, se conforman ambientes prefabricados, soñados por citadinos cansados del fastidio de transportarse horas en automóvil o transporte público, ávidos de un refugio aislado.

 Sin embargo como todo panorama, este tiene una contraparte: el oxímoron. Esto se trata de una figura lógica, una paradoja lingüística y formal, dos términos que se conjuntan formando una doble negación, en arquitectura, se entiende como el mal amalgamado de tipologías, estilos, lenguajes. Autores como Borges y Shakespeare se valían de este contradictio in adjecto para desarrollar un tercer término que se adecuara a la situación descrita. Pero, regresando al quehacer arquitectónico, ¿Cómo es posible que nos encontremos con estos contradictorios seres si ya tenemos las preestablecidas tipologías genéricas?, ¿Cómo ocurre la conjunción de ruinas arqueológicas con centros comerciales, áreas verdes recreativas rodeadas de superautopistas, parques invadidos por estacionamientos? Todos estos ejemplos nos remiten a la imagen de algún lugar de la ciudad y resultan absurdos por definición, algo falló. Como uno se puede imaginar existe un gran riesgo al hacer este tipo de uniones, como si se tratara de un alquimista haciendo mezclas una y otra vez en busca de oro, la ciudad está plagada de intentos de alquimia.

“Los buenos poetas copian, los grandes poetas roban” el dicho por T.S. Elliot (Missouri, 1888) confirma la teoría de la creación -en portmanteau; la genialidad del individuo prevalece en la calidad de la transformación de todo lo aprendido para aprehenderlo –hacerlo propio, saber pasar la cantidad suficiente del estilo de la época por el filtro del artista para así evitar al decadente genérico.

 >A227

In αρχιτεκτονική on 27 27America/Mexico_City julio 27America/Mexico_City 2012 at 10:45 PM

En el estudio y la práctica de la arquitectura, la palabra organización ha sido una constante. Se escucha mucho hablar de organización-espacial, organización-territorial, organización-armonía, organización-temporal, organización-mental/creativa.

Si retomamos la definición más pura de “organización” nos encontramos que es un sistema diseñado para alcanzar ciertas metas y objetivos. Estos sistemas pueden, a su vez, estar conformados por otros subsistemas relacionados que cumplen funciones específicas. De ahí que la mayoría de las definiciones de organización nos lleven al concepto de un grupo social.

Pero si partimos de esta definición, se despliega ante nosotros un campo de desarrollo totalmente arquitectónico también. Podríamos decir que la organización es el sistema para alcanzar el objetivo de la “arquitectura». Ahora, como todo buen sistema, la organización tiene sus medios para llegar a su objetivo, los cuales podemos sintetizar en: forma, espacio y estructura.

A lo largo de la historia de la arquitectura, existen etapas en las que se ha favorecido más a alguno de estos componentes que a otros, y es ahí donde han surgido los estilos y tendencias, que han ayudado a formar parte de nuestra cultura.

Es conveniente también hablar de la importancia de la organización en quienes son los emisores de ese medio: los arquitectos, o estudiantes de arquitectura; este tipo de organización se puede abordar desde dos puntos de vista, pero en un mismo objetivo; que sigue siendo la arquitectura.

La primera perspectiva sería abordar la importancia de la organización en nuestro quehacer universitario. La organización es clave para la disciplina. Si bien la carrera de arquitectura exige un perfil del estudiante muy específico, pues como bien lo sabemos no basta con saber dibujar, o ser bueno haciendo maquetas; hay que tener la capacidad de concretar nuestras ideas, la habilidad de generar información útil para el proyecto, saber administrar nuestro tiempo.

Sería prudente hacer una pausa y plantearnos que tan organizados somos en ese aspecto, y darnos cuenta que tanto mejoraría la calidad de nuestros proyectos al llevar una organización adecuada de nuestra vida arquitectónica-académica.

El segundo punto de vista  abordado a un nivel cognitivo-creativo. Sabemos que la creatividad es el proceso que tarde o temprano deviene en arquitectura. Entendido como arquitecto o aspirantes a creadores o artistas de la arquitectura, alguien que necesita un orden mental inmutable. El momento del diseño lleva consigo una representación mental, que a su vez implica un proceso cognitivo. Es fundamental llevar una organización mental-creativa adecuada para poder alcanzar el objetivo que es la arquitectura, la buena arquitectura; la arquitectura de los artistas.

>Maya